BMW HP2

HP2 son las siglas que BMW uso para una de las gamas más atípicas de la firma alemana. Era el acrónimo de ‘High Performance’ donde el número dos era en relación al número de cilindros. Eran motos radicales, deportivas y tecnológicas y digo ‘eran motos’, porque la gama se componía de tres versiones.

La primera en llegar fue la BMW HP2 Enduro allá por el año 2005. Tomaba como base de partida la mítica R1.200 GS pero recibía muchos cambios tanto para aligerarla, como para hacerla más potente y adaptarla a un uso más extremo que la GS. Llamaba fuertemente la atención su aspecto, que llegaba a recordar a las clásicas motos de campo con su guardabarros delantero y el faro redondo sin ‘careta’.

Era una montura muy singular, con detalles tecnológicos como la suspensión trasera neumática o la transmisión por cardán. El chasis era tubular y desarrollado usando la ámplia experiencia de la firma en rallyes de larga duración como el Dakar.

Rebajaba un total de 35 kg frente a la 1.200 GS y la potencia se iba hasta los 105 CV.

Usando esta HP2 Enduro como base de partida, BMW desarrollaba la HP2 Megamoto, una versión claramente enfocada al asfalto y sin pizca de intenciones de enfrentarse al off road. La idea era enfrentarse a la inminente llegada de la Hypermotard de Ducati y a la Supermoto de KTM con las típicas armas de BMW: motor boxer de dos cilindros, personalidad a raudales y tecnología.

Era una moto grande, aunque ágil y potente, más potente que la Enduro a pesar de compartir mecánica, pues llegaba a los 113 CV a 7.500 rpm. De serie montaba escape Akrapovic, sistema ASC (Automatic Stability Control) y embrague antideslizamiento.

Las suspensiones, frenos y ruedas también eran totalmente diferentes entre la HP2 Enduro y la HP2 Megamoto, siendo en esta última totalmente asfálticas. Lo mismo que ocurría con la estética, algo más convencional la Megamoto, aunque desprendiendo personalidad como toda BMW.

Tras la Enduro y la Megamoto, la siguiente moto con acrónimo HP2 fue la Sport, una máquina basada en la R1.200 S que se postulaba como la más racing de toda la gama BMW por aquella época gracias a sus 130 CV y a sus 199 kg en orden de marcha. Nada que ver con sus hermanas de gama, siendo una moto enfocada a circuito.

Respecto a la R1.200 S, la BMW HP2 Sport modificaba chasis, suspensiones y diversos elementos del motor, como los árboles de levas y las levas, equipaba pistones forjados, bielas específicas y conductos de admision rediseñados. Además, todo ésto se acompañaba de un doble radiador de aceite y un escape Akrapovic.

Como toda BMW, los acabados de todas ellas eran elevados, pero esta HP2 Sport contaba con cosas como unos manillares Magura, llantas de aleación forjadas y suspensiones öhlins regulables.